Un hombre esta sentado en una sala de Espera.
Todo es blanco: las paredes, el sillón, la lámpara;
su smoking y su galera también.
Todo es blanco menos él, que es verde.
Tiene los dedos entrelazados de los pies.
¿Porqué?, alguien podría preguntarse.
Pero no hay nadie más que él para ser alguien.
Y él no se lo pregunta.
La que no está tranquila es la sala,
que se pregunta porqué el hombre es verde.
Pero la sala no es alguien.
Entonces, nadie se pregunta nada.
Hasta que llega Espera y pregunta:
¿Qué hace usted en mi sala? ¿No ve que me la llena de intriga?
- La estoy esperando – contesta él.
Y la intriga se escurre por debajo de la puerta.
Esto es genial: "La que no está tranquila es la sala, que se pregunta porqué el hombre es verde".
ResponderEliminarYa te había dicho que este texto me gusta mucho.
Es una alegría ver que de nuevo hay movimiento por acá.
Un beso grande